Consejos visuales para conducir de noche sin riesgo
La conducción nocturna como factor de riesgo
Por la noche hay una pérdida natural de la calidad de visión producida por:
- Miopía nocturna.
- Pérdida sensibilidad al contraste.
- Pérdida agudeza visual.
- Dejamos de apreciar colores.
- Pérdida detalles de los objetos.
- Pérdida agudeza visual.
- Peligro de deslumbramiento.
Miopía nocturna
Un elevado porcentaje de la población tiene ciertas dificultades para poder ver nítidamente durante la noche y realizar tareas como conducir y apreciar nítidamente los faros de otros coches o letreros luminosos. Aunque estas personas vean bien durante el día (con corrección o sin ella), de noche sufren de miopía por no ser capaces de distinguir nítidamente los objetos alejados o luminosos.
Causas de deslumbramiento
El deslumbramiento se debe básicamente a la difusión y dispersión de la luz que atraviesa la óptica ocular, es decir, una fuente de luz pequeña y de gran intensidad sobre un fondo oscuro. Un ejemplo los faros de un coche o una farola, puede crear un deslumbramiento en forma de halo luminoso que disminuya el contraste e incluso impida la visibilidad completa de objetos situados alrededor de la fuente de luz. Es muy común que esta difusión intraocular aumente con la edad (formación de catarata).
Los conductores que presentan más dificultad de visión nocturna tienen problemas de visión que han de corregirse como puede ser: miopía, astigmatismo, personas con deformación y o incluso personas que han sido intervenidas quirúrgicamente para corregir un problema visual. Estas personas manifiestan síntomas como sensibilidad a la luz y visión borrosa.
También hay que tener en cuenta cuando se conduce por la noche, las gafas reflejan parte de la luz emitida por ciertos objetos como pueden ser los faros sobre fondos oscuros y podrían interferir en la visión de la carrera, hay que decir que solo son situaciones muy puntuales.
Situaciones de riesgo más importantes en la conducción nocturna
Se han realizado estudios que demuestran que existe una mala calidad visual en condiciones de niveles bajos de luz y que pueden poner en peligro la seguridad de la conducción:
- Riesgo de atropello a un peatón o un animal que invade la calzada.
- Riesgo de colisión por alcance a un vehículo parado, generalmente por avería.
- Riesgo de no percibir bien la información de las señales de tráfico.
Consejos para una correcta visión nocturna
- Si se utilizan gafas para conducir, es importante mantener bien limpios y sin daños los cristales.
- Se recomienda que los cristales lleven tratamiento antirreflejante, específico para conducción.
- No esperar a la renovación del permiso de conducción, el conductor debe hacerse una revisión de la vista, al menos, una vez al año.
- Si el conductor detecta alteraciones o pérdida de la visión durante la conducción nocturna debe acudir a su óptico-optometrista.
- Si notas molestias oculares como lagrimeo o picor de ojos porque son los primeros síntomas de somnolencia y cansancio. Localiza un lugar seguro donde parar el coche y descansar antes de seguir el viaje.
- Si el conductor nota pérdida de campo visual, o tras una operación de cirugía refractiva tiene especialmente molestias ante el deslumbramiento de otros vehículos, debe acudir a su oftalmólogo u óptico-optometrista con carácter urgente
